5 de agosto de 2015

Preocupa la llegada de Haas

Se quieren agarrar la cabeza...

En la escudería Manor llevan tiempo trabajando de cara a la próxima temporada, es que son conscientes que a partir del año que viene, la última porción de la torta que les corresponde en el reparto de las ganancias puede quedar en manos de la nueva escudería norteamericana, lo que supone la pérdida de varios millones.

De no desaparecer ninguno de cara a 2016, la próxima temporada la grilla tendrá once equipos. Pero la reglamentación actual indica que los premios económicos que brinda la FOA sólo se reparte entre los primeros diez clasificados, lo que significa que ya no tendrán la tranquilidad de este año, de que a pesar de correr con un coche viejo tienen la garantía de cobrar el premio por quedar décimo.

Por lo que el director deportivo de Manor, Graeme Lowdon, ha mostrado su preocupación por la amenaza que supone la entrada de Haas en la Fórmula 1, la que espera contrarrestar con un buen chasis que llevaría trabajando su equipo.
Por lo que he podido ver, el equipo que llegará el próximo año tendrá una idea de un coche de Fórmula 1 diferente. Será interesante ver la progresión. Nosotros tenemos que centrarnos en qué podemos hacer sin las reglas e intentar ser lo más competitivos que podamos el próximo año. Estamos desarrollando el próximo coche. Estoy contento con el progreso ya que parece realmente bueno y eso da energías a todo el mundo para seguir trabajando. Como sabéis, las carreras serán rápidas por lo que podemos ser complacientes, y del mismo modo no podemos esperar al rendimiento que está por venir”.

Tenemos que seguir empujando todo lo que podamos, intentar ganar velocidad y ver cómo va la segunda mitad de la temporada. Esperamos no volver hechos polvo. No habrá descanso, sé que es lo mismo para todos los equipos, pero hemos tenido un comienzo inusual este año y no hemos tenido una oportunidad de respiro, pero ahora ya lo sabemos. La gente prueba su estado físico y mental. Debido a la reglamentación que nosotros apoyamos, hay dos semanas de descanso en la fábrica, por lo que los chicos pueden pasar el tiempo con sus familias, cargar las pilas y estar listos para darlo todo en la segunda mitad de la temporada”.

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