Tras haber pasado Fernando Alonso por el departamento de ensamblaje, le tocaba al brasileño participar de los últimos retoques y la puesta a punto del nuevo modelo que está a punto de salir de Maranello.
Luego de que el asturiano pasara allí el sábado y el domingo, Felipe continuó con el trabajo en la fábrica el lunes y el martes, día este último en el que se prestó para el diseño de su butaca.
Felipinho realizó el lunes una sesión en el simulador para probar las últimas "piezas" del coche de 2011 y después se reunió con Aldo Costa y Nikolas Tombazis para conocer los desarrollos más recientes e intercambiar sensaciones sobre el nuevo modelo. Antes de meterse en la zona de ensamblaje de la escuadra para trabajar en su nuevo asiento junto a los ingenieros y mecánicos de la casa roja. Concluyendo su visita con una larga charla con su ingeniero de pista, Rob Smedley.
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