La escudería alemana ha comenzado a promocionar sus impulsores para proveer a otro equipo a partir de la próxima temporada. El hecho de que Mercedes esté impulsando a tres escuderías y que el sábado haya tenido cinco coches entre los primeros siete clasificados, ha tocado el orgullo de BMW, que se ha comprometido con su gente a suministrar sus motores el próximo año. Mirando rápidamente al 2010 el objetivo de BMW pasaría por seducir a Red Bull, quien este año termina su contrato con Renault y ya habría averiguado por Mercedes. A lo que Mario Theissen, en una declaración al Sport Bild, contrarrestó: "Tenemos la capacidad necesaria para ofrecer nuestros motores a otros equipos."
Pero por el momento, el jefe del equipo Red Bull, Christian Horner, ha comentado que no tienen prisa a la hora de tomar una decisión en este sentido. "En cuanto a nuestra elección de motor, podemos esperar hasta el invierno," indicaba.
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